Según un estudio de la Universidad de Brigham en EEUU, aquellas niñas entre 11 y 16 años que juegan a los videojuegos con sus padres, se sienten más conectadas con la familia, con una salud mental más fuerte y su comportamiento era mejor.
Al final habrá que comprarlas la consola… o bien el estudio de la Universidad está patrocinada por Sony, Sega…
Si queréis leer la noticia completa os dejo a continuación el enlace de la publicación en europapress.com:
Los videojuegos unen a padres e hijas