El oficio de cuidador es tan antiguo como el hombre, pero llevado a los tiempos actuales, el cuidador a domicilio es una actividad muy demandada y más ofertada todavía por diferentes tipos de profesionales como enfermeras, matronas o auxiliares.

Hoy en día hay un aumento de la demanda de profesionales que prestan sus servicios cuidando a estas personas en los propios domicilios por diversas razones:

-          Hay mayor número de personas ancianas por la mejora en la calidad de vida y el descenso del número de nacimientos.

-          Búsqueda de ayuda en la atención al recién nacido y a la reciente mamá.

-          Mayor número de profesionales que ofertan estos servicios.

Existe, en este ámbito, una buena oferta de auxiliares o de enfermería en España, tanto a nivel particular, como por parte de empresas dedicadas a estas labores.

                                                                                                                               Foto: simaje 

Situaciones en las que puedes necesitar del cuidador a domicilio

l  Personas mayores con problemas de movilidad y con distinto grado de dependencia (movilización de encamados, cuidados básicos en el aseo, alimentación, etc.)

l  Seguimiento de patologías o trastornos que requieren de constante supervisión (hipertensión, diabetes, cura de ulceras, etc.)

l   Bebés o niños con trastornos o enfermedades que requieran ayuda especializada.

l   Personas que acaban de salir del hospital de una intervención quirúrgica o de un proceso patológico.

l   Atención al postparto, cuidados básicos perinatales, atención en el puerperio.

l  Personas con necesidades puntuales, normalmente no dependientes, pero que requieren una actuación profesional (inyectables analgésicos por lumbalgias, cura de heridas quirúrgicas, vacunación).

l  Personas con alguna discapacidad, por lo que les resulta muy difícil movilizarse y salir a la calle (paraplejias, demencias, alzheimer, etc.)

l  Aquellas personas cuidadoras de otras personas, que muchas veces se ven desbordadas por el desconocimiento y necesitan una ayuda extra o algún profesional que les muestre cómo llevar a cabo determinados procedimientos.

Cuidadoras profesionales

Hasta hace bien poco, la imagen que se tenía de la cuidadora a domicilio era de una mujer entre 45 y 60 años, sin titulación especializada. Sin embargo, la gran oferta de profesionales que existen en la actualidad en situación de demanda de estos tipos de trabajos, ha abaratado el coste de estos profesionales, cada vez más solicitados y esto ha hecho que tengamos que revisar dicho perfil.

En la actualidad estamos en el ranking de países más ancianos en el noveno lugar, y si la tendencia actual se mantiene, según la O.M.S (Organización Mundial de la Salud), a mediados del s. XXI seremos el país más anciano del mundo.

Pero la figura del cuidador al domicilio no se queda exclusivamente en el ámbito geriátrico o de la dependencia. Cada vez es más solicitado la atención en el domicilio a las mujeres que acaban de ser mamás, contando de la ayuda de profesionales como matronas o enfermeras, que les realizan el cuidado básico de la episiotomía, de la incisión quirúrgica de la cesárea, vigilancia y cuidado de las mamas, educación para la salud en la realización de ejercicios para el suelo pélvico, para la lactancia materna, y cuidados básicos del recién nacido como es la cura del cordón umbilical, el baño y la alimentación, etc.

 Foto: Isaf Joint Command

Dónde encontrar cuidadores

Existen multitud de formas de encontrar a estos profesionales en la actualidad, desde anuncios en los hospitales, periódicos, anuncios de empresas en medios de comunicación, a través del boca a boca y también mediante la búsqueda en internet, a través de portales especializados en la búsqueda de estos profesionales o de las páginas webs de empresas dedicadas, donde se puede obtener todo tipo de información sobre servicios, coste, profesionales, etc.

El coste económico de estos profesionales varía en función de una serie de cuestiones a tener en cuenta:

-          El grado de dependencia o la gravedad de la persona que hay que cuidar

-          La titulación y experiencia de la persona que se contrata

-          Si es un profesional autónomo o proviene de una empresa que presta cuidados a domicilio.

-          Las técnicas o labores que deberá desempeñar el contratado

-          La ciudad donde se viva (en 2004 la más barata de España era Santander con una media de 4,40€/hora y la más cara Madrid con una media de 9,61€/hora).

Lo que está claro, es que siempre será una garantía, dejar a tu hijo o a un familiar dependiente en manos de un profesional cualificado, que además, y esto debe valorarse, será atendido en su propio domicilio, lo que reduce el riesgo de infecciones y enfermedades hospitalarias, y aumenta la satisfacción y el confort de la persona atendida.

Si quieres una respuesta profesional a tu caso concreto o tienes una duda, no dudes en preguntarme y pincha la siguiente imagen