Las nuevas tecnologías están posibilitando que muchos niños que padecen sordera bilateral profunda puedan oír gracias a los implantes cocleares ¿pero qué son estos aparatos?
Los implantes cocleares son unos dispositivos electrónicos que permiten instaurar una audición funcional a personas que presentan una sordera o hipoacusia profunda de ambos oídos. Es importante señalar que son aparatos diferentes a los audífonos ya que requieren de cirugía para implantarlos y funcionan de manera distinta.
Estos equipos de componen de dos unidades: una interna, que se coloca quirúrgicamente en el hueso temporal y es la encargada de mandar una señal eléctrica al cerebro a través del nervio auditivo , y una externa que capta los sonidos a través de un micrófono, los procesa y los envía a la unidad interna. Ambas partes se encuentran unidas a través de un imán.
Foto por Ydomush licencia GNU obtenida de Wikipedia
No todas las personas que padecen una pérdida auditiva, son candidatos a usar este tipo de dispositivos y tienen que cumplir unos requisitos que establecen los médicos basándose en si resultarán o no beneficiados de su uso.
Algunos de ellos son que la sordera sea profunda y en ambos oídos, que la cóclea se encuentre dañada, que sean personas motivadas a usarlo y que no consigan una gran mejoría en su audición con el uso de audífonos.
En los niños se suele implantar antes de los 5 años de edad para facilitar la adquisición, aprendizaje y desarrollo del lenguaje oral. Algunos profesionales señalan mejores resultados de aprendizaje del habla cuanto más precoz es la implantación de este dispositivo.
La audición que tendrán estos niños no será igual que la que tendrían con un oído sano, pero en la mayoría de los casos puede ser funcional y suficiente para adquirir un nivel de habla bastante similar a la de los niños con audición normal. Eso sí, necesitarán de rehabilitación logopédica y apoyo familiar durante este proceso de aprendizaje del habla.
Existe controversia a la hora de si es positivo o contraproducente para la adquisición del lenguaje oral utilizar también el lenguaje de signos que utilizan las personas con sordera o un apoyo signado al habla. Ante esto, cabe señalar, la experiencia que se está dando en algunos países en los que se está utilizando el bilingüismo (lenguaje de signos- lenguaje oral) como método de aprendizaje y parece que los progresos lingüísticos de estos niños son aún mayores, no interfiriendo el aprendizaje del lenguaje de señas en la adquisición del habla.
Para terminar, decir que la intervención quirúrgica es bastante segura y que se puede hacer una vida prácticamente normal con un implante coclear, excepto por algunas excepciones muy concretas (no se pueden hacer resonancias magnéticas porque el aparato es de metal y se recomienda no realizar deportes de contacto por no dañar la unidad interna del aparato).