Antes que nada quisiera felicitarlos por esta página ya que hoy la encontré y fue una bendición encontrarla ya que ha contestado varias de las preguntas que tenía con respecto a mi pequeño. Mi pregunta a la que no encontré respuesta en lo que leí es la siguiente: Tengo un hijo de 4 años y siempre lo he notado distraído. Cuando yo le cuento cuentos sí atiende, es más, después de 5 días él me cuenta el cuento completo como si se lo aprendiera de memoria pero en la escuela y en los deportes su conducta es diferente y cuando es cuestión de atender a un llamado hasta de mi parte es diferente. Cuando está en el entrenamiento siempre está distraído y cuando el entrenador le habla por su nombre varias veces, gritando para que lo escuche él no responde. Lo mismo para en la escuela, hoy la maestra me dijo que como que es muy soñador y siempre está pensando en la inmortalidad del cangrejo, al grado que hoy la maestra lo estuvo llamando y como lo intentó varias veces y él estaba distraído, todos sus compañeros de clase lo llamaron al unísono con su maestra hasta que atendió. A mí me apena cuando los entrenadores le hablan y no contesta, yo intenté algo para ver si escuchaba o no y por ejemplo hace unos días fuimos a una playa y como se estaba alejando lo llamé a gritos varias veces y no volteaba, pero cuando dije la palabra “BURRO” volteó. Yo le pregunto por qué voltea y me dice que esa palabra le gusta. Yo le he dicho que la uso porque solo así me atiende, pero que él no tiene nada qué ver con los burros. Yo quisiera saber si es cuestión de la edad o si puede ser alguna otra cosa. Cuando tenía 3 años una maestra me dijo que tenía atención dispersa. ¿Cómo puedo ayudar a mi pequeño? Les agradezco de antemano la orientación que me puedan dar. Gracias de verdad. Ninive López
Buenos días Ninive, gracias de nuevo por confiar en cometelasopa. Vamos a intentar dar contestación a tu pregunta.
Lo primero que te diré es que sin llegar a ver a tu hijo es muy complicado darte un diagnóstico, y más sin hacerle ningún tipo de prueba, claro está. Por otro lado te diré que la conducta que me cuentas, a simple vista, no parece del todo normal. De todas formas te repito que sin verle no es posible hacer un diagnóstico. Por otro lado sí te aconsejo lo siguiente: lo primero que deberías hacer, si no lo has hecho ya, es acudir a la consulta del pediatra, porque aunque pueda, a priori, parecer un tema psicológico, se deben descartar afecciones físicas (como por ejemplo a nivel auditivo, aunque no parece el caso, siempre es mejor estar seguros y asesorados por un buen profesional). Además de que también están perfectamente capacitados para diagnosticar distintas afecciones de ámbito psicológico.
Según lo que nos cuentas, tu hijo tiene cierta “desconexión social”. Este síntoma se produce en diversas patologías que deben estudiarse y descartarse. Entre ellas se puede hablar de “trastornos generalizados del desarrollo”, categoría que engloba patologías como el Trastorno Autista o el Trastorno de Asperger (con ello no quiero decir que tu hijo lo tenga, pero sí debe estudiarse). Asimismo también se podría dar el caso de las “ausencias” o “crisis de ausencias”, que se producen por una desconexión del cerebro no superior a unos 15-20 sg, por una actividad eléctrica anormal en el cerebro (crisis epilépticas). Con lo que nos has contado, tanto la pediatra de cometelasopa como yo (el psicólogo), pensamos que necesitas una adecuada evaluación de tu hijo desde un ámbito multidisciplinar. Por un lado desde la pediatría, como te he indicado, para descartar afecciones de origen físico, por el que puede requerir ciertas pruebas o estudios, como un registro electroencefalográfico (no un electroencefalograma suelto, sino un registro continuo en un periodo de tiempo). Por otro lado, una evaluación desde la psicología, con entrevista, observación y pruebas de ámbito psicológico.
Tienes que entender que nuestra intención no es querer asustarte, pero este síntoma que nos describes, sí se da en las patologías que te hemos comentado, por eso la necesidad de descartarlas. No obstante, esas patologías psicológicas se hallan en un continuo, en el que existen distintos grados, desde los más severos hasta los más leves. Por ello la necesidad de hacer un estudio detallado del caso de tu hijo. Desde cometelasopa te animamos a que nos sigas preguntando cualquier duda que tengas, así como a seguir contándonos cuestiones relacionadas con la pregunta que nos acabas de realizar, o incluso a mantenernos informados del seguimiento que le realicen a tu hijo. Esperamos haberte ayudado en algo y gracias por confiar en nosotros.
Buenas tardes. Mi pregunta es en relación a mi hijo de 6 años. Creo que sufre algo de “acoso” y burlas en el colegio por parte de sus compañeros. La cuestión es que él es muy bajito de estatura y siempre ha sido enormemente tímido, no sé si por el hecho de que es bajito o simplemente porque es su personalidad. Él no nos cuenta que en el colegio se metan con él, peros i nos ha hecho algún comentario su profesora y cuando le llevamos o le recogemos, vemos actitudes de burla y de menosprecio por parte de algunos compañeros. ¿Qué podemos hacer para atajar este problema y para que no vaya a más? Sonia T.
Buenas tardes Sonia. Por desgracia el “bullying” como se le llama hoy en día, es un tema que siempre ha existido en el ámbito escolar, y no por esto hay que restarle importancia. Por darte algunos datos, no es tan frecuente que se produzca a edades tan tempranas, aunque sí se da, pero es mucho más frecuente a medida que se van haciendo más mayores. Afecta más a niños (varones), y las agresiones por parte de niños suelen ser más físicas, mientras que por parte de las niñas (hembras) suele ser más verbal, aislamiento, exclusión, insultos…
La primera medida que te aconsejo, si no lo has hecho ya, es hablar con tu hijo del tema e intentar ver cuál es su percepción del problema. Hay que valorar cómo lo está viviendo él, si puede ser causa de otros problemas actuales o que se produzcan en el futuro. Tienes que valorar cómo afronta él esas situaciones. Es muy adecuado entrenar a los niños en asertividad, es decir, en enseñarles a decir que “no” cuando no quieran hacer alguna cosa que se les demanda. En caso de no tener unas “herramientas” adecuadas con las cual actuar ante esas situaciones, puede ser conveniente que le llevéis a un psicólogo que evalúe la cuestión y que le entrene en dichas herramientas, con el fin de que aprenda a afrontar las distintas situaciones sociales.
Por otro lado, creo que conveniente que tratéis el problema, si no lo habéis hecho ya, con la profesora y/o con el tutor. Este tema también les incumbe a ellos como responsables de la enseñanza de tu hijo y de su bienestar durante su estancia en el colegio. Abordadlo desde vuestra preocupación y hacedles entender, si no lo entienden de la misma forma que vosotros, que estos problemas son reales y no carecen de importancia, como podemos observar hoy en cualquier telediario…
Como última opción, creo conveniente también hacer una reunión con los otros padres, para hacerles conocedores del problema, ya que en ocasiones desconocen la cuestión, y pueden contribuir, educando y corrigiendo comportamientos de sus hijos, a que el problema se solucione.
No obstante, mi consejo principal, después de hablar con vuestro hijo y valorar cómo está realmente la situación, es que, en caso de que lo consideréis adecuado, le llevéis a un psicólogo infantil, que le vea y que valore la cuestión. Tenemos que empezar a perder el miedo a ir al psicólogo. Espero haberte ayudado con las indicaciones que te dado. Gracias por enviarnos tus dudas.
Hola y enhorabuena por la sección, nos aclara muchas dudas a muchos padres. Ahora soy yo el que necesita consejo. Tenemos un hijo de 6 años y una hija de 2, y siempre ha vivido con nosotros una mascota, un perro, que por desgracias de la vida, acaba de fallecer hace más o menos un mes por un atropello de coche. Nuestra de hija de 2 años pregunta pero no le da más importancia, ya que aun es pequeña y no es muy consciente. Sin embargo, nuestro hijo de 6, si se le ve afectado, al igual que nosotros, y tiene un montón de dudas. Nos gustaría que nos dierais algunas pautas para hacérselo más llevadero. Gracias. Roberto S.
Hola Roberto, gracias por confiar en nosotros y sentimos la pérdida que habéis tenido. El caso que habéis tenido suele ser, para muchos niños, el primer encuentro que tienen con la muerte. Se les debe prestar una especial atención y un mayor cuidado si cabe, y no liarle demasiado con explicaciones científicas o físicas sobre la muerte, a no ser que él os lo pregunte.
Según los estudios, los niños no comienzan a ser plenamente conscientes de que la muerte es un estado “irreversible”, hasta los 9-10 años, aunque siempre puede haber casos de más edad o más prematuros. Dos cuestiones muy importantes que tenéis que tener en cuenta; la primera es que debe haber sinceridad ante todo. No se le debe mentir ni ocultar nada, que no sean maduros, no quiere decir que sean tontos y menos con 6 años. Hacerle partícipe de la situación, si no lo habéis hecho.
Y lo segundo, debéis contestarle a todos sus interrogantes, que no rellene “lagunas” de desconocimiento con fantasías e invenciones, que muchas veces no contribuyen a nada. Habladle en un lenguaje que él entienda las cosas, con tono suave, cercanos, y sin dramatizar la situación ni tampoco restándole importancia. Vuestro hijo pasará un duelo a su manera, al igual que vosotros, y lo mejor que podéis hacer es estar a su lado, con el fin de resolver todas las dudas que plantee y de “echarle un ojo” para ver cómo se encuentra. Dejad que se exprese, que llore, que se enfade, que hable del perro… debe expresar su estado de ánimo, no inhibirlo. También es normal si en algún momento os empezáis a preguntar si podéis suplir la ausencia con una nueva mascota.
Mi único consejo para esta cuestión, es que no os deis prisa en hacerlo si esa es vuestra decisión, dejar que pase un tiempo para que vuestro hijo pase ese trámite. Una vez pasado un tiempo, nadie mejor que vosotros para decidir si él está preparado para afrontar el tener una nueva mascota. Buena suerte y mucho ánimo.
Hola. Tengo un hijo de 5 años con el que discuto a diario por el hecho de ir al colegio. De un año para acá ha dejado de gustarle ir al colegio, y cada mañana es la misma historia, discutimos, le amenazo y al final casi le llevo forzado. No sé como reconvertir esta situación. He hablado con su profesor y me ha comentado que en clase se porta bien y que no ha observado nada extraño o ningún cambio que le haya provocado esta conducta. ¿Qué puedo hacer para mejorar su actitud? Isabel L.
Hola Isabel. Por lo que nos cuentas, y a pesar de que el profesor te comente que no ha observado nada que haya producido un cambio de conducta, si que nos refieres que esta conducta tiene un principio, por lo que entendemos que anteriormente no era así. Basándonos en esta suposición, debes hacer un esfuerzo por intentar averiguar con él, si realmente ha tenido un origen, algún suceso desagradable en el colegio, algún cambio significativo en el entorno familiar, etc.
Como pautas, te podemos dar las siguientes:
- Lo primero es eliminar todas las amenazas y malas maneras a la hora de llevarle por la mañana. Eso solo consigue empeorar la situación.
- Hay que reforzar cualquier pequeño avance que realice el niño. Al principio te puedes ayudar de recompensas externas (regalos, actividades…), que luego irás progresivamente cambiando por refuerzos verbales.
- Implica a todo el mundo en el proceso, el profesor, la cuidadora, el padre, los amigos… entre todos es más fácil lograr que cambie su actitud.
- Vuelve a hablar con el profesor y coméntale que lo que vas a hacer para que te eche una mano. Pregúntale por sus relaciones con el resto de los compañeros, por su actitud en clase, en el recreo…
- Háblale de las aventuras que puede vivir en el colegio, de los amigos que puede hacer, ensalza lo positivo del colegio.
- Intenta facilitar el contacto con compañeros fuera del ámbito escolar, en actividades extraescolares, invitando a algún amigo a jugar en casa por la tarde, en fiestas de cumpleaños…
Si el asunto no mejora puede que tu hijo esté padeciendo una fobia escolar, cuestión que te recomendaría que asistieras a un profesional de la psicología infantil, con el que tratar dicho asunto, sobre todo si este problema altera el normal devenir de la vida de tu hijo y de la familia. En ocasiones hay que cambiar el escenario, la clase, el colegio…
Temporalmente nuestra sección “Tu Psicólogo Responde” no va a seguir funcionando, por lo que os pedimos que no hagáis nuevas consultas. No obstante podéis revisar los artículos de las semanas anteriores por si alguna de los anteriores consejos puede resolver vuestras dudas.