Hola mi hija tiene un gran problema y cada vez más porque los estudios son más exigentes, ella es muy estudiosa y muy buena en general cuando iba al cole, instituto etc., de buenas notas de saber, que se le queda todo etc. Pero su problema es que trabaja lenta y no le da tiempo a acabar cuando hay exámenes, trabajos etc., por lo que no se ve recompensado su esfuerzo…. porqué le ocurre esto y cuál sería la solución, está desesperada porque está en tiempos de exámenes y por su manera de trabajar lenta puede repercutir en las notas, siempre. Le agradecería me respondan lo antes posible. ¿Tiene algún tipo de problema?, ya que esto le ocurre desde siempre. María.
Hola María, gracias por enviarnos tus dudas lo primero. Lo segundo, el caso de tu hija debe ser evaluado sin demora, ya que como tu cuentas, tiene y ha tenido repercusiones. Mi consejo es que acudas lo primero, si no lo has hecho ya, a hablar con el profesor o tutor para intercambiar opiniones e intentar averiguar cuál es la posible causa, ya que pueden ser muchas y muy diversas. El siguiente paso que daría sería pedir cita con el psicólogo del equipo de orientación escolar que tenga o le corresponda, ya que como te digo, debe ser evaluado y las causas pueden ser múltiples.
Las posibles causas por enumerar algunas pueden ser:
- Ansiedad ante las pruebas o los trabajos académicos.
- Problemas de lecto-escritura no detectados.
- Trastornos relacionados con la atención.
- Problemas de motivación.
- Trastornos sensoriales relacionados con la visión y/o la audición.
- También puede deberse a los métodos de estudio que utiliza, por lo que te recomiendo que leas los siguientes artículos: Papá, tengo un examen ¿me echas una mano?, Papá, ¿me ayudas a estudiar? Técnicas de estudio para ayudar a tu hijo
- Trastornos relacionados con la fatiga y el estrés.
- Problemas de tipo emocionales o cambios vitales importantes, también pueden influir en el rendimiento académico…
El caso de tu hija, como te comentaba, debe ser evaluado por un especialista, ya que las causas pueden ser múltiples. Aunque sí te recomiendo que acudas a hablar con el profesor o tutor para tratar este tema, por si te puede orientar o podéis intercambiar opiniones al respecto.
Hola! Esta es la segunda vez que contacto con vosotros y os doy las gracias de nuevo por el trabajo que realizáis porque nos es de gran ayuda todos los artículos de vuestra página.
Mi pregunta va referida a la conducta de mi hijo. Tiene 2 años y 5 meses. Es un niño muy activo y cuando salgo a dar un paseo le gusta correr, saltar… (lo normal). Pero cuando le llamo, le digo que se acerque porque no vamos o porque vamos a cruzar una carretera, él sale a correr para que no lo pille. Una desobediencia total. Me gustaría que me hiciera caso en esos momentos sobretodo porque podría pillarle un coche, y también porque me pone de muy mal humor que le llame y eche a correr. ¿Qué puedo hacer? ¿No sé cómo actuar? ¿Debo castigarle cuando lo haga? ¡Qué difícil tarea la de ser padres……!
Muchas gracias por escucharme!!
Hola Brígida, pues gracias de nuevo por enviarnos tus consultas. La consulta que me planteas en esta ocasión es el típico caso de desobediencia infantil, que ya en otras ocasiones se ha planteado.
Te voy a remitir a un artículo de mi página, www.psicoglobalia.com, sobre técnicas de modificación de conducta que te puede venir muy bien echar un vistazo: ¿Cómo modifico la conducta de mi hijo?
Para el caso concreto que me planteas y con la edad que tiene tu hijo, es muy fácil pensar que tu hijo, con esa conducta de desobediencia, lo único que pretende es llamar tu atención, es decir, “jugar” contigo. Él ha visto además que cuanto más te lo hace más consigue tu atención y que además te irrita, por lo que consigue su objetivo.
Para esta situación, la mejor forma de modificar la conducta es a través de la extinción, es decir, debes eliminar todo tipo de atención sobre él cuando realice este tipo de actos, ignorarle.
Entiendo que cuando vais a acercaros a un cruce o paso de cebra no puedes ignorarle, pero sí puedes practicarlo cuando os vayáis a ir a casa y no acuda. En esta situación, no solo ignórale, le adviertes de forma pausada y logrando su atención que es hora de irse a casa. Cuando él no te obedezca tú te vas, siempre que puedas hacerlo en una zona segura para él. Debes de insistir y mantenerte firme, y si te toca estar esperando “escondida” en algún sitio, deberás hacerlo. No es cuestión de causarle miedo, es cuestión de que aprenda que cuando mamá dice que hay que irse, hay que irse y no hay lugar a seguir jugando ni desobedeciendo.
Este sin duda es el mejor método para estas situaciones, pero siempre que te mantengas firme, si al final cedes, él comprenderá que lo vuelve a conseguir y lo volverá a hacer la próxima vez.
Si el método no te convence o crees que es difícil aplicar, puedes utilizar otro como el modelado, que lo explico en el artículo. Consiste en usar recompensas ante aquellas conductas que se van a asemejando a aquella que quieres que haga, hasta conseguir poco a poco la que tu quieres. Te puedes valer de gusanitos, de juguetes o lo que a él le guste. Dile que os vais a casa o que te espere antes de cruzar, si se detiene aunque no vaya hacia ti, es momento de darle la recompensa. Otro día si vuelve a detenerse le recompensas de nuevo. Al día siguiente le pides que además se gire hacia ti o que dé unos pasos en tu dirección, si lo hace le vuelves a recompensar… Y así poco a poco hasta que logres que haga lo que tú querías.
Puedes usar el coste de respuesta que muchos padres usamos. Es quitarle algo que le refuerza o le gusta si no hace lo que le pides o hace algo inadecuado. Por ejemplo, si le gusta mucho unos dibujos de la tele o un determinado cuento, le adviertes que se lo vas retirar si no te hace caso. Ese día si no te hace caso se lo retiras, y al día siguiente le vuelves a advertir. Así hasta que lo logres. Aquí debes ser hábil en escoger algo que realmente valore mucho y debes ser firme en retirárselo si no realiza lo que le pediste.
Con lo de cruzar la calle, pienso que el mejor método es el de la extinción, aunque no el más adecuado, ya que a veces se puede correr riesgos. Si no lo ves factible, utiliza el moldeado o el coste de respuesta. No uses nunca gritos ni te desesperes. Tu mejor arma es la constancia y si el padre también colabora, debe hacer exactamente lo mismo que tu.
Léete el artículo que te he comentado por si te sirve alguno de los otros métodos.
Temporalmente nuestra sección “Tu Psicólogo Responde” no va a seguir funcionando, por lo que os pedimos que no hagáis nuevas consultas. No obstante podéis revisar los artículos de las semanas anteriores por si alguna de los anteriores consejos puede resolver vuestras dudas.